¿UN
PERIODISTA O SIMPLEMENTE UN CIUDADANO?
Guadalupe Bhetsabe Díaz Chuñe
Resumen:
La profesión periodística en
los últimos años se ha visto empañada por situaciones que escapan de las manos de
los verdaderos profesionales de la información, quienes han optado por utilizar
las herramientas que le ofrece la tecnología y los que de cierta forma
participan en un menor grado para la difusión de información que atañe temas de
diferente índoles.
Palabras
claves: Periodismo ciudadano, periodismo profesional, tecnología,
labor periodística.
ASBTRACT:
Journalism in recent years
has been tarnished by events beyond the hands of true information professionals
who have chosen to use the tools offered by technology and which somehow
involved to a lesser degree for dissemination of information relevant issues
differently kinds.
KEYWORDS: citizen
journalism, professional journalism, technology, journalism.
Lo que se quiere informar:
Lo que se quiere informar:
Tener en mente lo que se
quiere decir es fácil, pero transmitir lo que deseamos decir es un proceso que
implica un mayor trabajo. Las personas suelen darle una interpretación rápida
de lo que oyen, pero en la mayoría de los casos esta traducción no concuerda
con lo que inicialmente quiso decir la fuente y es aquí donde se inicia la
distorsión del mensaje.
Reconstruir la realidad implica tener conocimiento de lo que acontece a nuestro alrededor y quien más que un periodista profesional para tomarse el tiempo de ayudarnos como ciudadanos a restaurar las nociones que se han perdido sobre la participación activa que debe tener como miembro de una sociedad.
“El
lenguaje radiofónico facilita las reconstrucciones de la realidad, y en
últimas, da significado a la realidad, ya que une el mundo externo y el pensamiento.
(…) Podemos hablar de un lenguaje particular a la radio porque tanto emisor
como receptor manejan unas mismas convenciones”. (Los axiomas de la radio, tecnología y periodismo radiofónico)
Manejar un lenguaje en la
radio implica tener la seguridad de que puedes ofrecer datos a los ciudadanos
pero permitiendo que sean ellos quienes saquen sus propias conclusiones sobre
los asuntos que se traten en una cabina radial. Esa es la labor de un verdadero
periodista, ser un facilitador de la información y esperar una reacción de la
audiencia para que sean ellos mismos quienes juzguen la situación de acuerdo al
contexto en el que se dan las cosas.
“El
periodista no es un mero intermediario o mediador entre el hecho y el público.
Es un intérprete, el artífice que nos ayuda a entender la realidad que nos
rodea, los sucesos que acontecen y afectan a nuestra existencia en el mundo
(...) Busca con rigor y minuciosidad el
significado que esos hechos poseen, pues bien sabemos que ver no es
comprender”. (Periodismo ciudadano vs.
Periodismo profesional)
Como podría considerarse a
la persona que facilita nuestro proceso de compresión, aquel que no solo
difunde una información sino, que hace lo posible porque ésta sea entendible y
pueda ser procesada por el público, quienes son los encargados de decodificar
los mensajes que llegan desde una fuente de información y transformarla para
entender lo que sucede en su entorno. La mayoría de procesos, por no recalcar
todos, involucran tanto a fuente como destinatario, pero quien es en realidad
la fuente cuando los mensajes son emitidos por un medio de comunicación, en
este caso es la labor del periodista quien cumple un papel fundamental para
hacer válido este proceso.
Características
periodísticas:
Ser meticuloso, detallista,
cuidadoso y llegar a ser perfeccionista, son una de las tantas cualidades que
debe acompañar a un periodista en su labor diaria, él es quien muestra al mundo
la realidad de los hechos, quien transmite un mensaje a personas, que por diferentes razones se
encuentran aisladas de los asuntos públicos y por ende, de los problemas que
aquejan a su comunidad. No es tarea
fácil, eso no está en dudad, pero se debe saber llegar a las personas, entender
que no todos asimilan un mensaje de la misma manera o en el mismo tiempo y en
base a ello ser capaces de desarrollar habilidades que le permitan informar sin
necesidad de llegar a “transformar la realidad”, porque eso es lo que menos se
busca en una profesión como lo es el periodismo.
Pensar que su mensaje llegará a miles de personas, es lo que debe prevalecer en la mente de un periodista profesional, son ellos quienes indagan en busca de una verdad, quienes recopilan datos, son los que corroboran fuentes y nos mantienen informados para generar una participación activa como público, actúan como mediadores entre las autoridades y la comunidad en asuntos políticos.
Tener un concepto global de lo que se busca en el periodismo es la labor en la que se viene trabajando para demostrar que existen personas que se han capacitado y se han formado para servir a otras y guiarlas de cierto modo hacía la luz de la verdad, mostrándola sin rodeos, de manera clara y directa lo que sucede mientras ellos realizan otras labores. Porque el mundo no deja de moverse mientras se descansa.
El acelerado incremento y avance de las tecnologías de la comunicación se ha convertido en las bases del avance tecnológico y con ello ha provocado un cambio trascendental en el desplazamiento de la forma de vida de la sociedad contemporánea, modificando los lenguajes, ideando nuevos códigos y creando una nueva imagen de la realidad que rompe con la noción tradicional de tiempo y distancias. En esta medida las características de las sociedades de la información van más allá de solo el uso de la información en el caso de los periodistas o del empleo que le den los ciudadanos a la información para ejercer sus derechos civiles y responsabilidades en la sociedad.
“El
periodismo profesional ha de saber adaptar sus discursos a las características
del nuevo entorno para la comunicación pública y cambiar la forma de
relacionarse con su audiencia (...) El periodista profesional está obligado a
competir con el resto de ciudadanos en el ejercicio de informar, formar y
entretener a otros ciudadanos (Reinventar
el periodismo: medios necesariamente más participativos para una sociedad más
democrática)
La colectividad exige que se
ejerzan cambios con respecto a lo que se vive actualmente en la sociedad, ya no
se puede considerar a un periodista como la persona que solo transmite
información, sino que se le debe asignar el término de facilitador de esta. No
todos son capaces de desenvolverse a una misma sintonía- para hacer referencia a
una locución radial- y de entablar conexión con la audiencia, la labor de campo
les permite a los profesionales del periodismo ejercer con mayor facilidad el
acercamiento que debe existir entre gobernantes y gobernados dentro de una
democracia en la que se observe la necesidad por ser partícipe de la
información y despejar todas las dudas que les impida pasar al siguiente
escalón, que sería en este caso una participación abierta y libre por parte de
los ciudadanos.
Marcando
realidades:
El papel de informar para un
periodista no solo implica ser fotógrafo de la realidad, sino que debe ir tras
la búsqueda de la verdad informativa, esa verdad que será fiel reflejo de que
acontece y que marcará el inicio para la formación de conciencia en los
ciudadanos. Un ciudadano informado tiene el poder de emitir juicios y será
capaz de separar una simple nota de una nota que realmente valga la pena, y
compartirá sus conocimientos con el resto, proporcionándole de esta manera la
opción de entablar un dialogo y proponer posibles soluciones a los diversos
problemas que se puedan presentar a diario.
Ante los nuevos cambios
sociales, es preciso señalar que se debe buscar nuevos métodos de expresión
para llegar a entablar un punto de conexión con los ciudadanos, pero que pasa
cuando lo que se difunde no es del agrado de la opinión pública. En algunos
casos se ha podido observar que es el público el que demanda determinado tema y son los medios de
comunicación, a través de sus periodistas los que le ofrecen una fuente de
entretenimiento o una forma de distracción, pero también existe la posibilidad
de que sean los mismos ciudadanos quienes traten de apoderarse de los mensajes y
de encontrar una oportunidad para ser ellos quienes difundan alguna información,
de la que han sido testigos.
Mostrar una nota periodística sin tener la mínima intensión de manejar dicha información y mostrar al público solo aquellos rasgos que se desean resaltar, es una ardua tarea que han afrontado y lo siguen haciendo los periodistas pertenecientes a distintos medios de comunicación en todo el mundo. Se sabe que los medios de comunicación como empresas tienen un reglamento interno, y que en algunos casos siguen una línea política al momento de redactar sus notas periodísticas, pero esto no es una justificación para “trabajar” la noticia de acuerdo a su conveniencia.
Quizás los años de experiencia para los periodistas que ejercen esta profesión los han ayudado a identificar rápidamente cuando una fuente es confiable o cuando los editores de un diario tratan de darle un rumbo a la información para conseguir cierto agrado por parte de los involucrados en la noticia, a diferencia de los nuevos profesionales que tienen en la mente que la primera obligación del periodista es la verdad y que su compromiso es hacía los ciudadanos.
“Ser
veraz significa que efectivamente los periodistas han de contar los hechos tal
como sucedieron, no deben manipular los datos, ni resaltarlos a su
conveniencia; tienen que ser rigurosos en la verificación, exhaustivos en las
pruebas, puntillosos en los matices. Y tienen, sobre todo, que saber reconocer
sus errores y sus equivocaciones, y estar dispuestos a purgar por ellas. (…)
Ser independiente equivale a que tengan consciencia del papel social que su
tarea implica”. (El oficio del
periodista)
La independencia en un periodista
es vital para poder desempeñarse con total libertad frente a situaciones que
consideren afectan a los ciudadanos y por ende deben ser parte del cambio y la
mejora para la sociedad. Mantenerse a la guardia, transmitir datos para que el
público pueda estar informado y ofrecerles una tribuna abierta a quien desee
participar con sus opiniones o quizás propuestas para lograr el objetivo
inicial, son algunas de las características que debe poseer un verdadero periodista
profesional a lo largo de su carrera como vigilante independiente de los
asuntos políticos que atañe a la comunidad.
La presencia de interés particulares
harán que un periodista se encuentre muchas veces en la encrucijada de
continuar con su trabajo pero siguiendo una línea política ya trazada o de
buscar un nuevo medio de comunicación donde le brinden la comodidad y la
libertad que se necesita para desempeñarse en este medio. El verdadero periodista profesional sabrá qué
decisión tomar y asumirá con responsabilidad las consecuencias que acarrea un
buen ejercicio de su profesión, en estos casos se debe ser conscientes de
quienes están detrás de lo que se difunde,
a quienes les llega esta información y que es lo que se puede hacer con
ella
“El
futuro del reporterismo residirá, por consiguiente, en la creación de una
conversación, en la que los roles de productores y consumidores mudan, una
formula del periodismo con identidad sobre la que apenas aventuramos a
vislumbrar lo que aportará”. (No todos
somos ya periodistas. Un análisis de la utopía del periodismo ciudadano desde
la perspectiva del reportaje interpretativo).
Se debe tener presente que
el trabajo de periodistas y ciudadanos, tiene que ir de la mano para lograr grandes cosas y dar
soluciones a una mayor cantidad de
problemas sociales, económicos y políticos que aquejan a una sociedad. Si bien
es cierto que en los últimos años se ha observado la presencia y la
participación activa de los ciudadanos, quienes emiten una respuesta rápida y
reaccionan ante los datos que se les ha emitido, estos han demostrado que
pueden hacer más que dar una simple opinión, pueden ser quienes sugieran los
temas que necesitan ser abordados de acuerdo a sus necesidades. Muchos medios gracias
al avance tecnológico han instalado en sus páginas web una ventana en donde los
ciudadanos pueden contar una noticia a través de sus vídeos, fotos o
grabaciones de voz de las situaciones en la que ellos son testigos directos de
lo que pasa.
El gran dilema surge, cuando planteamos la participación de los ciudadanos como una nueva forma de periodismo, un periodismo ciudadano que se apodera cada vez más rápido del uso de las nuevas tecnologías de la información, pero si no es considerado periodismo, entonces que categoría se le puede asignar a la intervención que tienen los ciudadanos y no como simples lectores, espectadores u oyentes en el caso de la radio sino como personas que ejercen una función parecida al periodismo pero no igual a ella.
Las opiniones que se generan, son diversas y cada quien defiende su postura pero en este apartado se puede marcar la diferencia entre un periodismo profesional y un periodismo ciudadano. El primero radica no solo en el tiempo de preparación que le ha llevado formarse como profesional, sino que durante los años de experiencia ha entablado relación con diferentes contactos que le han permitido hacer uso de la información y contrastar la fuente de la que proceden los datos que publique. Un periodista no es aquel que se encuentra en la calle, es testigo de un accidente, toma una foto y la sube a una red social, ese periodismo ciudadano es subjetivo, no encuentra una forma de verificar, que tan veraz es lo que se difunde porque no ha sido formado para ello, su labor va hacía la participación que pueda tener. En comparación con la objetividad e imparcialidad que debe mostrar un periodista profesional, debe marcarse la diferencia, ese es uno de los retos que afronta el verdadero periodismo.
“El
periodismo ciudadano se aproxima más a la comunicación personal a través de
conversaciones espontáneas que a la narración de historias reales representada
por el periodismo profesional”. (3)
Es muy común considerar la participación que tienen los
ciudadanos como una nueva clase de periodismo, si bien es cierto ellos dan
grandes aportes en cuanto una nota periodística es publicada, la función que
realizan debe ser diferenciada por la minuciosidad que caracteriza al
periodista profesional, no solo al momento de redactar una nota porque su papel
empieza mucho antes de eso, se inicia desde que se recopilan datos para una
posterior estructura de cómo se emitirá
la información obtenida.
Un periodismo de investigación incluye más que noticias que exponen corrupción y hechos criminales, contienen temas importantes y apropiados que incluyen información en la que se explica cómo trabaja o falla el sistema. Desde hace mucho tiempo los periodistas se han dado cuenta que a los ciudadanos les interesa saber qué es lo que pasa en su realidad, pero no tener una simple noción de ello, sino que quieren llegar a conocer con más profundidad sobre determinado tema y quien más que un profesional para mostrarle y darle la facilidad de que pueda mantenerse conectado.
“Sólo
es periodismo investigativo el que se especializa en descubrir lo que alguien
se empeña, por propia conveniencia, en
mantener oculto. (..) El periodismo investigativo es una investigación propia
del periodista sobre un hecho que es relevante para la sociedad y cuyos autores
y/o cómplices intentan mantener oculto en defensa de intereses propios”. (¿Es viable el periodismo investigativo?)
En el periodismo de
investigación no solo se debe buscar la verdad, se debe ir más allá de ella, para ofrecer al público los contenidos
necesarios para que ellos mismos en base a estos datos formen su propia
historia y traten de encontrarle sentido a hechos importantes para su
comunidad.
Si bien es cierto que el periodismo
de investigación genera un gasto económico superior y la difusión de su material es en un futuro a
comparación de otros formatos periodísticos, cuyos resultados se ven en el
presente y no necesitan de muchos ingresos. Se puede observar que existen
periodistas que aún mantienen su postura frente a la posibilidad de que resurja
nuevamente este tipo de periodismo que busca sacar al descubierto todo lo que
implica un problema de gran importancia para la sociedad.
Manejar información, dentro
de un medio de comunicación es algo normal, hacerlo como un simple ciudadano
genera ciertas dificultades desde el punto de vista que esa información puede
afectar a unos y beneficiar a otros. En
este sentido se debe ser cuidadoso y un periodista profesional sabe desligarse
de sus emociones para tratar de ser lo más imparcial posible frente a situaciones
como estas, mientras que a un simple ciudadano le será difícil encontrar un
punto medio de la información que tenga en sus manos y optará por seguir una línea
que terminará con la manipulación de datos e información.
Tratar de darle un rumbo a
la información es como decirle a la audiencia que es lo que tiene que pensar o
como deben actuar, y esa no es una función periodística, por el contrario lo
que se busca con esta labor es darle una visión más amplia de que pueden hacer
como ciudadanos de esta sociedad, quienes pueden ser protagonistas de la
información y no necesariamente porque ellos fueron quienes difundieron la
información sino porque pueden reaccionar y actuar de manera eficiente. Una manera
de marcar las necesidades que puedan tener los ciudadanos es generando
conciencia en cada uno de ellos para que puedan ejercer roles que les permitan ir
de la mano con el periodismo profesional, ya que si bien es cierto se puede
confundir sus funciones, el punto en el que debemos enfocarnos hace referencia
a un trabajo en conjunto en el que los únicos beneficiados sean los ciudadanos.
REFERENCIAS:
*Bibliografía:
GONZALO RODRÍGUEZ Paula: “Periodismo
ciudadano, evolución positiva de la comunicación”, Colección Fundación
Telefónica 2011 – Madrid-España
MANDELEVICH, Pablo. “Ética
periodística en Argentina y en el Mundo”. Argentina: FOPEA, KAS, 2005.
RESTREPO Javier Darío. “El zumbido y el moscardón”.
México: FCE, FNP, 2004.
SALAVERRÍA Ramón: “La
convergencia tecnológica en los medios de comunicación: retos para el
periodismo” número 23, Barcelona-2008. Pág. 44
*Revistas científicas:
(2) FERNÁNDEZ AREAL Manuel: Una profesión titulada “Periodismo”,
Revista Latina, 2010.
(1) MARTÍNEZ SOLANA Yolanda: “Luces y sombras del periodismo
ciudadano: actitud frente a un fenómeno imparable”. Revista Científica Complutenses,
2007.
(3) PELLEGRINI RIPAMONTI Silvia: “Análisis conceptual del
periodismo ciudadano y propuesta metodológica para analizar su contribución
informativa”, 2010.
(5) TORRES ERNEY Jesús: “El rigor: garantía para los
periodistas, credibilidad para los medios y esperanza para los ciudadanos”.
Revista Palabra Clave, 2004.
(4) URE Mariano y Martín Parselis: “Una ética autorregulada
para el periodismo ciudadano”, 2010.
*Fotografía
propias en acción:
Entrevista
realizada a Alex Cárpena
|
Entrevista
realizada a Juan Cabrejos
|
*Vídeo
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